Extractos de Doméstico
HERNÁN PÉREZ
Hernán Peréz nace en 1992 en un barrio de Macúl sumergido entre el fútbol, la iglesia, y la calle. Una triada que representa la base de su escritura en el poemario Doméstico. Su relación con la literatura nace en una edad tardía, alejado de un hogar donde los libros tienen valor. Sus poemas atraviesan la idea de la palabra hermosa, la escritura elevada, siendo estas normas reemplazadas por colores grises, una visión cruda de la realidad que forjó su recorrido por los barrios de Santiago. Mientras estudia teatro descubre su pasión por la dramaturgia escribiendo obras para sus compañeros. Después se traslada a vivir a Iquique donde obtiene su título de panadero, al igual que gana un fondo medioambiental con la obra titulada Llamas en la Ciudad. Ha escrito Carnval en el Salar, también ganador del fondo medioambiental, y la obra de marionetas Submarina. Actualmente reside en Santiago.
CHILE
y el fútbol
negocio redondo
La fachada bonita
Los pobres con casa
Los niños patriotas
Los sueños callampas
Plaga
Trampa
Plata
no hay
la sofía es puta
se la chupa al miki roni
eso dicen
por quina
por quina
por quina
le saco el escombro
el pol no se baña
NO se ríe
NO se habla
NO se cree
NO sé
eso dicen
que la rosa
su mamita
tomó cloro
pa desinfectarse
del mal olor
de su hijo
bacteria
en las paredes
hongo
en el pan
moho
en las cortinas del baño
en la boca
en los ojos
en los dientes
de las personas que se juntan
de pasaita en la plaza
de maicillo y caca
y rumorean
que el Felipe
estuvo en el mir
que recibe plata
por ser comunista
que se pega cabezazos
con las granadas vencidas
que quedaron
de la dictadura
duro
llora y ríe
y habla como con el residuo
de la tortura sobre sus labios
agotados
de un mártir frustrado
que parece
sus vecinos odian
así dijo
la señora Luci
que le contó
el tío Hicho
cuando estaba en el club del barrio
y escuchó al juan barza
que había soñado con
la pobla
la vía doce
la Ruti
los narcos
el Hans
el Berna
los evangélicos
la señora Luisa
don Lalo en el suelo
el Nico chico
el Curri chico
diego soto-care poto
la pelota
la Muriel
la Ingrid en el negocio
escuchando
que el asbesto
nos salvó la vida
que el asbesto nos dio
un techo
eso dijo el gobierno
eso dicen los cuentos
Angustia…
Se mueren de penas
Que ya ni saludas
Que ya ni miras
Que ya ni hablas
Papito te empeño mi alma
Por favor
Por favor
Por favorcito
Tio Yoni
Usted me entiende
Usted me conoce
Gracias
Muchas gracias
De verdad gracias
Que le diste trabajo
A tu hijo
Embolsando tus sueños.
El Yoni
Llegó viejo al barrio
Después que se pololió
A la Raquel
El loco
Creyó jugar a la pelota
Pero era malo
Aunque se esforzaba por
Correr detrás
Del camión de la basura
Tiraba
Bolsas negras
Gente tiesa
Gente güeña
Niños flacos
Pañales con tierra
Objetos podridos
Vidrios
Y comida añeja
Y las mexicanas
Le tocaron la puerta
Con plomo
Con grises
Con moscas.
De casas y casos
Esta mancha no sale.
Este día no termina.
Las cortinas no se abren.
Súbele el volumen a la tele,
no la apagues.
Quiero hablar con alguien.
Que me escuche llorar y no se espante.
Tengo sueño. Dormir se me hace tan difícil. Me quedo mirando el techo y me pongo a sacudir las ideas para estar tranquila. Pero la tranquilidad me incomoda. El silencio me provoca comezón. Las heridas no paran de sangrar. Y me acuesto a su lado, bajo una sábana que pesa como fierro. El mismo fierro. Y el mismo amor. Los hijos se pudren y la raíz parte la casa. Yo sigo dentro. No puedo salir. De alguna forma tengo que organizarlo todo y limpiarlo todo. Que se vea bonito. Mire mi cara. Los años pasan. El mismo chaleco que nunca termino de tejer. Bajo la promesa, ahora sí que me voy. Ahora sí que se acabó. Se acabó el quix, la cera, el cloro y la infección sigue pegada al mismo muro que sostiene la casa.
¿Quiere que lo mate?
No puedo, usted me reta.
Me voy señora.
Pero esto no se trata de mi señora.
Porque yo me voy y usted se queda con el problema.
Via doce En la casa Raravez
Me quedo aquí a que la carne se cocine punto no coma
cruzando________________________________________________la calle
cruzando_________________________________la calle hay unos juegos
que se sostienen por pura compasión.
la araña
el balancín
el resbalín
el sin fín
de niñas y niños
que se trenzan en los fierros
a media noche
a medio dia
a medias
apenas
(Me cobijo en el metal
frio/caliente
roido
descascarado).
se inventan sonrisas
nos salen costras
se tararean canciones
los secretos desaparecen
el cielo nos descubre ahí
en medio de tierra
y moco
seguimos aquí.
me moriría así,
pero la estamos pasando tan bien
mejor…
cuando me entre
cuando me llamen
cuando se lleven los juegos
cuando no nos quede infancia
para compartir
cuando el juego
ya no sea juego
y la araña
un fierro doblado
y el resbalín
un fierro resbaladizo
y el sube y baja
me baje
y me golpee
la adultez
y ya no nos queden sonrisas para inventar
cuando las heridas ya no sanen con costras
con forma de plaza
y el cielo pase desapercibido por nuestras cabezas camino al trabajo.